La electrificación de la economía y el flujo de exportaciones con Europa, principales desafíos de España para mantener el liderazgo energético

El sector de las energías renovables en España ha experimentado un crecimiento muy significativo en las últimas décadas y continúa avanzando a gran velocidad. El auge de estas fuentes de energía y, en concreto, de la energía solar fotovoltaica se debe, entre otras variables, a su capacidad para contribuir al avance de la transición energética y a la descarbonización del planeta.

Según los últimos datos de UNEF, actualmente contamos con 56 GW de energía fotovoltaica y eólica instalados en España y, para alcanzar el objetivo de 138 GW establecido en el borrador del PNIEC para 2030, será necesario acelerar el ritmo de instalación desde los GW actuales, hasta aproximadamente 7,5 GW anuales, en el caso de la solar, y 4,5 GW en el de la eólica.

Sin embargo, aunque España es un mercado energético maduro con muchas ventajas competitivas respecto al resto de países europeos (radiación, disponibilidad de suelo, infraestructuras, etc.), todavía existen numerosos desafíos para mantener esta posición de liderazgo en Europa y atraer nuevas inversiones.

Este ha sido el foco del debate en la quinta edición de Energyear España, el congreso de referencia sobre los últimos avances tecnológicos, las tendencias del mercado y las políticas energéticas que están definiendo el futuro de las energías renovables en España. Juan Luis Cantón, Country Head de Lightsource bp en España, participó ayer junto a otros expertos en uno de los paneles principales para defender el papel de la energía solar en el avance de la transición energética en Europa.